Los medicamentos en el mercado
Los medicamentos no están ajenos al modelo económico que impera en nuestra sociedad -el capitalismo- ante esto se ven afectados por el desarrollo de la economía y sus variables. Los medicamentos son producidos en su mayoría por corporaciones que dominan el mercado y por ende pueden fijar precios según su producción y los beneficios -financieros- que éstos les traen.
Entonces podemos aclarar que la salud de las personas queda a merced del mercado que permite aumentos y control de precios, entre quienes lo dominan. Por ejemplo según un estudio realizado por el Observatorio de Políticas Públicas de la Universidad Nacional de Avellaneda (UNDAV) indica que durante el gobierno de Mauricio Macri hay un aumento sostenido de los principales medicamentos genéricos (de licencia libre y por ende más baratos que los patentados por laboratorios) de más del 400%, mientras que si comparamos con la inflación promedio (de todos los productos) aumentó un poco más de un 200%, osea los medicamentos subieron más que la inflación.
También agrega un listado de las seis tipos de drogas que más han aumentado, todos aumentos superiores al 350%:
La industria farmacéutica
Las industrias no son instituciones de caridad, si no que en su mayor parte son empresas que invierten en profesionales y tecnologías. Pero al ser parte del mercado que invierte según la oferta y demanda, hay medicamentos que son producidos en gran cantidad, por distintos laboratorios y de distintas formas (cápsulas -incluso distintos tipos de cápsulas-, gotas o jarabe). Algunos ejemplos que se pueden observar en el siguiente gráfico es sobre la producción de medicamentos de consumo masivo como el Paracetamol y el Ibuprofeno contra otro que consume un menor grupo de personas que es la Levotiroxina, que consumen personas con problemas a la tiroides y otro medicamento que comercialmente no rinde que sirve para tratar la Tuberculosis.
En el Vademecum Nacional de Medicamentos (VNM) es una fuente oficial de actualización permanente, en la que se publican todos los medicamentos actualmente comercializados en la República Argentina y donde el usuario puede consultar el precio sugerido, entre otros datos de interés.
También se puede conocer quienes dominan el mercado y producen en el país, por ejemplo hay 409 laboratorios registrados que producen más de seis mil medicamentos en distintos formatos como cápsulas, gotas o inyecciones. Pero como en todo mercado hay quienes lo dominan, en este caso 15 laboratorios/empresas abarcan más del 50% de la producción, o sea: tienen mayor injerencia en la producción, aunque esto ocurre en todo el mundo,Argentina no es la excepción por ejemplo están presentes las multinacionales como la alemana Bayer y no se puede dejar de mencionar a las empresas locales como Bagó, Roemmers o Gador.
Obviamente al estar sujeto al mercado, el consumo también se puede ver afectado por la crisis económica que afecta al país y en el siguiente gráfico elaborado con datos del Observatorio de Salud, Medicamentos y Sociedad de la Confederación Farmacéutica de Argentina, que nuclea a los profesionales del rubro, se expone la caída de más de un millón en la compra de medicamentos populares que equivale a un 7,23% del consumo en comparación de los primeros ocho meses de 2018 y 2019. Mientras que el único medicamento que aumentó sus ventas es porque en 2018 fue lanzado al mercado según fuentes del Observatorio.
El derecho a la salud y el lucro
Ana María Fernández, ex funcionaria del Hospital Pirovano, está a cargo de un banco de medicamentos de una iglesia en el barrio porteño de Núñez, donde entregan de manera gratuita a personas -principalmente en situación de calle- medicamentos que consiguen con miembros de la comunidad de fe o médicos particulares que donan las muestras gratis, con la condición de que la receta sea expedida de un hospital público.
Fernández explica que en su Banco ha aumentado las solicitudes porque: “Los medicamentos pelean con la comida, la gente preferirá la comida a la hora de pagar un remedio”, también agrega que deben poner requisitos como que las recetas sean de hospitales públicos, porque entienden que por: “El colapso por la situación económica, se ve población que debe volcarse a los hospitales públicos, saliendo de su prepaga y asistir a estos centros de salud”.
Datos recopilados por el Observatorio de la UNDAV muestran como ha aumentado la incidencia de las prepagas sobre el ingreso de las personas y los más afectados han sido los jubilados.
Esta estadística de la UNDAV confirma la teoría que plantea Fernández de que la salud es un mercado y algunos no pueden ser parte porque el sistema deshumaniza y comenta un ejemplo: “Hay un colapso de los hospitales y se debe atender al paciente rápido en 10 minutos, escucharlo y entregarla recetas rápidas”. Además de la pérdida de poder adquisitivo las personas pierden dignidad en el trato y disminuye en distintas áreas su calidad de vida, en especial la de los jubilados.
Los medicamentos muchas veces no están disponibles y las empresas tienen distintos motivos hay problemas en la disponibilidad de medicamentos en las farmacias u hospitales, además del faltante por la demanda (que en el invierno los antigripales pueden ser los más cotizados) en la ANMAT (Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica) publican mes a mes los remedios que no están en disponibles:
También es importante el rol de las farmacias que pese a existir una regulación, principalmente con el PAMI que controla el valor del medicamento, este puede variar según dónde se compra.
Aquí un pequeño mapeo de los precios en farmacias en un radio no superior a los 2 kilómetros en unos barrios de Buenos Aires.